
Essaouira
El Encanto Costero de Marruecos
Esta ciudad costera combina un ambiente relajado con una rica historia. La medina de Essaouira, rodeada de murallas, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, mientras que su puerto pesquero sigue siendo uno de los más activos del país. Con su vibrante escena artística y su popularidad entre los amantes de deportes acuáticos como el windsurf, Essaouira ofrece una mezcla perfecta de cultura, arte y naturaleza.

Rabat
Historia y Elegancia en la Capital
Rabat, la capital de Marruecos, es una ciudad elegante y llena de historia, menos visitada que otras, pero igualmente fascinante. Aquí puedes explorar la Kasbah de los Oudayas, una antigua fortaleza con vistas al Atlántico, y el majestuoso Mausoleo de Mohammed V. Rabat combina su pasado imperial con un presente vibrante, con amplias avenidas, museos modernos y una escena cultural dinámica que refleja la modernidad de la capital.

Meknès
La Joya Imperial de Marruecos
Meknès, una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos, ofrece un ambiente más tranquilo que sus hermanas mayores, pero con igual importancia histórica. La imponente Puerta Bab Mansour da la bienvenida a una ciudad rica en monumentos. A pocos kilómetros se encuentran las antiguas ruinas romanas de Volubilis, uno de los sitios arqueológicos más importantes del norte de África, que te permite viajar a la época romana.

Ouarzazate
La Puerta al Desierto y al Cine
Conocida como la puerta de entrada al desierto del Sahara, Ouarzazate es el epicentro del cine en Marruecos, con estudios cinematográficos que han albergado películas y series de renombre mundial. Además, la cercana Kasbah de Ait Ben Haddou, un espectacular pueblo de arcilla y piedra, es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y ha sido escenario de muchas producciones de Hollywood. Ouarzazate es también el punto de partida ideal para explorar las dunas del desierto y las gargantas del Dades.

Agadir
Sol, Playa y Relajación Total
Agadir es el destino perfecto para aquellos que buscan disfrutar del sol, el mar y el relax. Con sus extensas playas de arena dorada y sus resorts de lujo, es ideal para unas vacaciones en la costa atlántica. Tras un terremoto en 1960, la ciudad fue reconstruida, y hoy ofrece una moderna infraestructura turística, perfecta para quienes buscan combinar descanso con actividades como el surf o excursiones a las montañas del Atlas.